—Sharon no tenía ninguna intención de ser indulgente hacia Hadison. —Dijo directamente:
— Admites tu error muy rápidamente. ¿Crees que esto funciona conmigo?
Hadison frunció el ceño. Tenía la sensación de que el motivo de esta mujer para buscarle no era simple. No era solo por May, parecía haber algo más.
—Mira, incluso admití mi error. Solo estoy escuchando tus enseñanzas y preparándome para cambiar. Si crees que no servirá, le daré a esa joven dama otra suma de dinero y nunca haré tales cosas de nuevo.
Por supuesto, Hadison sabía lo que Sharon quería escuchar, así que habló rápidamente, pensando que Sharon estaría satisfecha.
—Todavía no me conoces bien. Eres en verdad una persona inteligente. Desafortunadamente, la persona que conociste fui yo. Guarda tus trucos. Sé lo que pretendes. —Sharon realmente no entendía cómo este desgraciado podía jactarse tan descaradamente.
—¿Entonces cómo crees que debería resolverse esto? —Hadison todavía sonreía.
